El ser humano y la cultura.

No podemos entendernos separadamente como sólo culturales, y tampoco cómo sólo biológicos.

Comparado con otras especies,el hombre es un ser precario. A cambio, tiene la habilidad de cultivar su medio natural para ponerlo a su servicio.

El hombre trasciende la biología e inaugura la cultura. Es producto de la primera y protagonista de la segunda.

El ser humano medita sobre qué estímulos quiere o no satisfacer y programa sus acciones para ello. La capacidad para elegir nos convierte en seres inacabados, debido a la indeterminación de las respuestas. La capacidad de separar los estímulos de las respuestas, de reflexionar permiten la objetivación y abrir la dimensión de la libertad.

La cultura debe entenderse como el modo por el cual el ser humano puede aliviar el peso de su libertad.

Los animales están limitados por instintos fijos, innatos a sus respectivos ambientes específicos. Solo registran aquello que es importante para su propia vida.

El ser humano, en cambio, es capaz de percatarse de todo a su alrededor. Desde el punto de vista físico, es un ser carencial; pero esto se ve compensado por su capacidad de transformar la naturaleza de modo que se vuelva útil para su vida.

• La  manera de vivir el mundo  e interpretarlo que tiene el ser humano.

• El conjunto de técnicas y recursos que nos ayudan a vivir.

• Las instituciones que organizan nuestra convivencia.

• Las ideas y creencias de los pueblos e individuos.

• Un alto grado de conocimiento alcanzado por algunos miembros de una comunidad.

Debido a que los hombres son seres carenciales desde el punto de vista biológico es incapaz de vivir en cualquier ambiente de la naturaleza realmente natural y original el ser humano ha de superar el mismo  la falta de los medios que se le han negado y esto ocurre cuando transforma el mundo con su actividad en algo que sirve a su vida.

El hombre está construido para transformar y dominar la naturaleza y por ello mismo para la posibilidad de la experiencia del mundo: es un ser práxico porque no especializado y carece por tanto de un medio ambiente definido. La esencia de la naturaleza transformada por el hombre en algo útil se llama cultura. La cultura es pues la segunda naturaleza: es la naturaleza humana elaborada por el mismo y la única en la que puede vivir. La cultura antinatural es su producto, de un ser único también antinatural construido actuando sobre el mundo.

El ser humano es un animal cultural es la clave para entender lo que somos somos animales luego contamos con unos orígenes biológicos y somos culturales lo cual nos diferencia del resto de los seres vivos y nos introduce en un nuevo orden.

El modelo reduccionista establece qué o todo se reduce a lo biológico o a lo cultural, por ejemplo: los animales siguen sus conductas por instinto, el hombre es un animal; ergo el hombre rige su conducta desde su instintos.

Este supuesto se hace falso puesto que se ignoran las aptitudes y capacidades de un individuo en el caso de no tener contacto con el mundo cultural y social. Tampoco es correcto entender al ser humano solo como cultural y obviar su interacción con la naturaleza.

Unifican la biología y la cultura (biocultural) como dos caras de la misma moneda.

Una interrelación entre biología y socialización.

Es falsa la posición que se suele hacer entre biología y cultura. Es tan natural lo biológico como lo cultural; no hay desarrollo lingüístico o emocional sin contacto cultural, ni cultura sin determinadas capacidades biológicas.

Somos los productos de nuestro origen biológico, de nuestro origen cultural y de su mutua interacción.

La naturaleza humana es biocultural.

La sociedad interviene directamente en el funcionamiento del organismo, sobretodo en la nutrición y la sexualidad. El hombre es impulsado por su constitución biológica a buscar deseo sexual y alimentos pero dicha constitución no le indica dónde buscarlos.

La sexualidad y la nutrición se canalizan en direcciones específicas, socialmente más que biológicamente, y esta canalización no sólo impone límites a esas actividades sino que afecta directamente a las funciones del organismo. Así pues, el individuo exitosamente socializado, es incapaz de funcionar sexualmente con un objeto sexual impropio y tal vez vomite cuando se le ofrece alimento impropio.

La sociedad pone limitaciones al organismo así como este pone limitaciones a la sociedad.

Cultura es el sustantivo abstracto del verbo latino “colere” que significa labrar un campo, hacerlo fértil o cultivarlo.

Para Cicerón, “padeia”(educación), se refería a un ideal que debe ser alcanzado para lo cual se necesita un cultivo personal, una tarea de formación y asimilación de una forma de vida. Cultivarse, dirá, es formarse en una comunidad determinada.

Más adelante, durante la Ilustración (s. XVIII), una cosa de formarse como individuo y otra integrarse en una comunidad o nación.

Es el ideal humano que hay que alcanzar y se cifra en una serie de conocimientos e informaciones que se deben tener o actividades que hay que realizar.

La cultura es una forma de vida y de interpretar la naturaleza.

Formar parte de una cultura es formar parte de una comunidad.

La cultura es el conjunto de creencias, tradiciones y técnicas de una determinada comunidad. Ésta se constituye en la red de símbolos y expresiones con la que los humanos damos sentido al mundo, ponemos cada cosa en su lugar y nos entendemos unos a otros.

Es el estudio científico de la cultura y se remonta al nacimiento de la época moderna, cuando, con la conquista y la colonización de América, surgen preguntas que dan lugar a la aparición del saber antropológico: los pobladores descubiertos ¿son seres humanos?. Para algunos como Fray Bartolomé de las Casas, la respuesta es positiva, para otros será la justificación del exterminio, la matanza o la esclavitud.

La ciencia de la cultura nace como tal en el siglo XIX, su objetivo es describir las culturas tal y como se presentan.

Sin embargo, existen diferentes enfoques, metodologías o escuelas según sus intereses.

“La cultura en sentido etnográfico es ese todo complejo que comprende conocimientos creencias arte moral derecho costumbre y cualesquiera otras capacidades y hábitos adquiridos por el hombre en tanto que miembro de la sociedad”.

• La cultura es aprendida.

Necesitamos integrarnos en una cultura y aprenderla.

Las destrezas y habilidades, entre las cuales se encuentra la facultad lingüística, requieren la enseñanza social y el aprendizaje individual. Dicha enseñanza se denomina socialización, que significa que el individuo, conforme va creciendo biológicamente, se va integrando en su comunidad a través de diversas vías. Y lo que el individuo hace es experimentar un proceso de endoculturación, de acomodar sus necesidades biológicas a las formas de satisfacción de las mismas asentadas en su comunidad.

La generación de más edad transmite a la generación más joven los modos de pensar y comportarse propios de esa comunidad. Está regla se cumple en todos los aspectos menos en el de las nuevas tecnologías el cual es el único ejemplo en el que la generación más joven enseña a la de más edad.

• La cultura modifica el somete a la naturaleza.

Nuestras necesidades biológicas están interpretadas y revestidas por la cultura.

• La cultura es compartida.

Pertenece a individuos que forman un grupo. Es difícil separar la sociedad de la cultura.

• La cultura es adaptante y mal-adaptante.

El hombre puede adaptarse a la naturaleza gracias a la cultura, pero determinadas formas culturales pueden ser mal-adaptantes, pues ponen en peligro la continuidad de la especie humana sobre la tierra.

• Cultura real.

La cultura real es la que todos los miembros de una sociedad determinada piensan y hacen a lo largo de su vida.

• Cultura ideal.

Está considerada como modelo por una sociedad, aunque puede estar reflejada o no en sus conductas y actitudes.

No es lo mismo lo que una cultura o sociedad hace y lo que dice o comunica.

Emic

Analizar una cultura desde dentro; el antropólogo intenta ponerse en la perspectiva del participante de esa cultura.

Etic.

Tomar distancia del grupo cultural y analizarlo desde fuera como un observador ajeno al grupo.

Subcultura.

Formada por un grupo social que posee y transmite una serie de patrones culturales que difieren de los de la cultura dominante. Dentro de cada cultura existen diferencias que vienen dadas por la edad, el nivel socioeconómico, la clase social, el origen étnico… Aunque todas las personas viven en esa cultura el grado en que aprovechan sus posibilidades es diferente de unas a otras, por ejemplo, la cultura urbana y la cultura rural.

Contracultura.

Es aquella subcultura cuyas formas de sentir o actuar cuestionan deliberadamente la cultura dominante. La contracultura es un movimiento de rebelión contra la cultura en hegemónica que presenta una forma de vida y de sociedad alternativa a la existente. Por ejemplo las tribus urbanas o los grupos sociales alternativos.

Sin cultura no hay individuos, pero sin individuos tampoco hay cultura.

• Determinismo cultural.

Afirma la prioridad de la cultura y señala que todo lo que hacemos y pensamos está ya dado por la cultura. El individuo es un mero resultado de la cultura en la que se inserta.

• Individualismo.

Da prioridad al individuo. Él es quien puede cambiar la cultura, el que la mantiene viva pues las facultades humanas están más allá de la cultura.

Amazon erróneas pues ni todo depende de la cultura dado que podemos cambiarla o influir en ella y el individuo lo puede todo puesto que también nuestras capacidades individuales están moldeadas por la cultura.

La cultura no nos determina sino que nos condiciona. Para que la cultura siga viva necesita ser asumida crítica y creativamente por el individuo. Luego podemos hablar de un condicionamiento mutuo.

En un determinado espacio social han de convivir personas identificadas con diversas culturas. Ante este multiculturalismo hemos desarrollado tres posibles actitudes:

• Etnocentrismo.

Analizar las demás culturas desde la propia convirtiéndose en el criterio para medir y valorar los restantes. Se trata de una actitud asimilacionista donde se pueden adoptar otras actitudes como la xenofobia, el racismo, el patriotismo fanático o la aporofobia.

• Relativismo cultural.

Analiza las diferentes culturas desde sus propios valores y no desde los valores de una cultura ajena, y recomienda mostrarse tolerante con las diferentes culturas. Sin embargo, no proporciona ni busca comunicación con otras culturas, sino que prefiere evitar cualquier contacto con otras culturas. Puede conducir a la actitud romántica que considera que todos los aspectos de otras culturas son siempre positivos.

• Hospitalidad universal. Interculturalismo.

Parte del respeto a otras culturas y propugna el encuentro entre las diferentes culturas en pie de la igualdad. Supone establecer un marco común de referencia como la Declaración de los Derechos Humanos. Propone aprender a convivir en un mundo plural y entender la diversidad como fuente de riqueza.

“Una criatura de un desaliño  repelente, presa de movimientos espasmódicos y a ratos convulsivos, que se agitaba de una parte a otra en incesante balanceo, a semejanza de algunos animales enjaulados, que mordía y arañaba a cuántos a hacían por atenderla y, finalmente, ajena todo incapaz de parar la atención en cosa alguna.” “Los ojos sin cesar, vagando un objeto a otro, hallándose poco ejercitados y coordinamos con el tacto que en modo alguno sabían distinguir entre una foto de bulto o una simple pintura; el oído tan insensible a los ruidos más fuertes como a la más emotiva de las melodías; la voz en el estado de mudez más absoluto; el olfato igualmente indiferente a la exhalación de los perfumes como el hedor de las basuras; el tacto se limitaba la función mecánica y no perceptiva.” “Incapaz de atención, privado de discernimiento, negado a la memoria, desprovisto de toda aptitud imitativa, desprovisto de todo recurso comunicativo. Insensible su alma a cualquier clase de afección moral. Su existencia toda quedaba reducida a una vida puramente animal”

“No podía mantenerse en posición erecta, correr, saltar o trepar y solo era capaz de andar arrastrando torpemente los pies. Permanecía callada casi todo el tiempo. Se masturbaba constantemente instituciones públicas”.

• El hombre es inferior a muchos animales en el puro estado de naturaleza.

• La superioridad moral del hombre no es sino resultado de la civilización.

• Son esenciales las facultades imitativas y la inclinación continua a buscar nuevas sensaciones en necesidades nuevas.

• Esta fuerza imitativa se debilita rápidamente con la edad, el aislamiento y toda clase de causas tendentes a embotar la sensibilidad nerviosa.

Probablemente existe un periodo crítico para el aprendizaje del lenguaje y de otras habilidades complejas, después del cual es demasiado tarde para llegar a dominarlos completamente.

El niño salvaje de L'Averyron y Genie, proporcionan una idea aproximada de lo que sería un niño “no socializado”.